El entrenador de Quilmes habló tras la eliminación ante Nueva Chicago. Sergio Rondina dijo que “estoy golpeado como todos, porque todavía no entiendo por qué nos quedamos con nueve, el partido se nos hizo cuesta arriba, me dolió eso sobre todo. Porque creo que en el primer tiempo tuvimos el control del juego, aunque quizás nos faltó un poco de peso ofensivo, que es lo que buscamos en el segundo desde el arranque. Nos encontramos con el gol, así y todo fuimos para adelante, tuvimos dos claras y después, con nada nos quedamos con nueve jugadores. No entiendo el por qué. Pero bueno, me quedó ese sabor amargo, porque sabíamos que éramos más que ellos y con nada nos quedamos afuera”. 

El DT agregó que “el fútbol tiene estas cosas, se dio así, se nos cerró el arco, tuvimos situaciones y no las pudimos convertir. La primera llegada de ellos fue gol, y vino de un lateral. Uno tiene bronca por habernos quedado afuera porque creo que teníamos como para seguir, ese es el fastidio mayor que uno tiene”. 

Rondina finalizó refiriéndose a su futuro. El entrenador, que tiene contrato hasta diciembre del 2025, expresó que “calculo que voy a seguir, veremos. Tengo que hablar con Mateo (Magadán), ver qué es lo que busca el club para el año que viene, ver un montón de cosas del plantel. Yo me siento cómodo en el club, me han hecho sentir cómodo desde el primer día, nos han dado todo. Tenemos que juntarnos a hablar, tener claras las cosas de los dos lados y después veremos. Hay muchos chicos que tienen contrato, tenemos que ver cuánto tiempo más seguimos entrenando, si licenciamos ahora o volvemos más tarde. Hay cosas que uno no las tenía pensadas, lo iremos viendo en estos días para saber cómo seguir. Seguramente miércoles o jueves volveremos a entrenar y después nos juntaremos. Ellos saben bien lo que yo pienso, me costó cuarenta y cinco días, me golpeaba la cabeza contra la pared, y ahora lo estaba disfrutando. Quería seguir disfrutándolo quince días más, el poder entrenar y estar en el día a día con ellos. No se nos dio”.