La dupla técnica integrada por Ian Romano y Néstor Frediani logró, al frente del primer equipo de Quilmes, cortar una racha de cinco partidos sin victorias y volver a sumar de a tres ante Estudiantes de Caseros. 

A la hora de analizar lo sucedido en el partido y durante los días en los que estuvieron al frente del plantel, Néstor Frediani dijo que “tratamos de hacer una semana tranquila, pedimos que recuperaran la memoria, porque es un plantel que ha hecho muy buenos partidos. Nosotros tratamos de darles algunas herramientas para que pudiera suceder y estamos realmente contentos porque los muchachos hicieron un gran partido. Lo nuestro era muy claro, desde el primer momento en el que nos llamaron los dirigentes para que diéramos una mano, sabíamos que lo nuestro era día a día".

"Sabíamos el rol que vinimos a cumplir, por eso tratamos de simplificarles a los muchachos lo más posible este momento, que no era bueno. Les dimos algunos trabajos sobre qué era lo que queríamos plasmar en cancha, porque consideramos que podían hacer lo que les íbamos a pedir, y lo hicieron, por eso estamos agradecidos a la predisposición y a la actitud que tuvieron los jugadores en estos días con nosotros. La satisfacción es que el equipo rindió bien y que se entregó, que era lo que queríamos”. 

Ian Romano, por su parte, afirmó que “ellos tenían que reencontrarse con ellos mismos, con el buen desempeño que tuvieron durante gran parte del torneo, y por suerte lo hicieron bien. Nosotros, en el poco tiempo que tuvimos de trabajo, buscamos eso, que ellos se reencontraran con lo bueno que hicieron antes, brindarles breves herramientas en función del rival al que teníamos que enfrentar y que supieran resolver situaciones que se podían presentar. No más que eso, muchas de las cosas que hicieron no fueron nada nuevo, sino algo de lo que han desarrollado a lo largo del torneo. Sacaron el partido adelante y fue todo muy positivo”.