El objetivo de Tigre está cada vez más sólido. Subcampeón en la pasada Copa de la Liga, el equipo de Diego Martínez se trazó el desafío de llegar a la clasificación para una copa internacional y ya se metió en esa zona. Hoy fue contundente desde principio a fin ante un Vélez Sarsfield que atraviesa una interminable racha adversa que ya alcanzó los 15 partidos sin ganar a nivel local (la segunda peor en su historia).

El "Matador" golpeó de entrada. El paraguayo Blas Armoa fue habilitado para quedar mano a mano con Leonardo Burián y sacó un remate fuerte, abajo, para decretar el 1-0 ante la explosión de su gente.

El conjunto de Victoria apabulló prácticamente a su rival y pasados los veinte minutos, el ex Boca y a préstamo del Inter de Italia, Facundo Colidio, amplió la ventaja para el local:

Ya en el complemento, Tigre pudo haber ampliado las diferencias, pero entre los palos y la falta de eficacia a la hora de la definición le impidieron alcanzar un resultado más abultado.

Por el lado de Vélez, que terminó con diez por la expulsión de Emiliano Insúa (doble amarilla) cuando transcurrían diez minutos del segundo tiempo, todo es preocupación. La continuidad del entrenador uruguayo Alexander Medina corre riesgo y la crisis futbolística lo encuentra a esta altura del año sin ningún objetivo por pelear, salvo por reencontrarse en forma urgente con un triunfo que traiga calma por Liniers.