Raúl David Caballero analizó el impacto de las redes sociales en la vida de la sociedad argentina, y consideró que “me da la sensación de que está más desnuda, porque es más difícil esconder conductas que no queremos que se entere el público. De manera que los que hacen cosas escondidas o desvían dineros públicos, están más incómodos, más observados”. 

En su columna semanal en el programa “Ir a Más” de Radio FAN (103.9 fm), el fundador de PERSPECTIVA SUR agregó: “Me llamó la atención que días atrás tuvimos en la tapa de los diarios al titular de la ex AFIP (Juan Pazo) mostrando que tiene bienes en el exterior no declarados; es muy raro que un funcionario que fue puesto para controlar el pago de impuestos, aparezca con problemas en sus declaraciones juradas. Es muy contradictorio”, apuntó el periodista.

“Es muy llamativo cómo una persona que está en la cumbre del poder, porque no veo que haya un funcionario que esté más alto del poder que el responsable de la AFIP en materia de control de la corrupción, haya quedado expuesto de esa manera”. 

“Y hoy vemos en la tapa del diario PERSPECTIVA SUR que una tiktoker (Georgiglle) publicó toda una historia de corrupción también, en un emprendimiento comercial -el otro era público-, un privado que promociona sin ningún problema un emprendimiento comercial (“Rooftop MQ”, en el centro comercial Nuevo Quilmes, frente al Parque Lineal Don Bosco) que aspira a ser exitoso pero que se lleva por delante toda la legislación, y de un día para otro, al barrio le apareció un boliche bailable en plena zona comercial”.



“Frente a este emprendimiento hay un barrio acomodado, y para el otro lado hay un barrio común, que es Villa Alcira, Bernal, al cual se le apareció un edificio en cuyo 6° piso le pusieron un bailable con música hasta a las 2 de la mañana”, describió el periodista. 

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“De manera que vemos cómo hoy las redes sociales instalaron de inmediato un asunto de corruptela, al igual que le pasó al muchacho de la AFIP, aunque en otro orden. Evidentemente las redes sociales hacen más difícil las cuestiones que antes se querían esconder, y de esta forma los funcionarios están mucho más vulnerables. Sea un juez, un concejal, un director, están mucho más expuestos, en un escenario que en cualquier momento lo ilumina un reflector cuando un vecino con su celular le publica un cortito en una red social que se viraliza y termina siendo noticia”.



“Tenemos que estar todos atentos porque en una discusión en una esquina, una cosa mal dicha termina viralizado. Y frente a este fenómeno, estamos todos igual, caminando en un escenario sobre el cual un foco fuerte se te puede prender en cualquier momento, y pasamos de la paz total, al disgusto en un solo paso”.