Se trataba de una inspección de rutina a talleres de la jurisdicción de la Seccional que dirige el comisario Darío Sebastián Barberis, para comprobar el cumplimiento de la ley 13.081, en el marco de las tareas de prevención del  robo y hurto automotor.



El jueves arribaron así a un taller de chapa y pintura sito en la calle Oscar Smith y General Acha, donde fueron recibidos por su propietario.

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Los agentes chequearon en el sistema informático y confirmaron que ningún automóvil que se encontraba en el taller poseía pedido de secuestro.  



No obstante, al inspeccionar el taller constataron el incumplimiento de las obligaciones exigidas por dicha ley, por lo que procedieron a la clausura del lugar. 



Tras encontrar diversas autopartes que no tenían la inscripción en el RUDAC (48 ópticas, 30 radiadores, 10 puertas, 12 parrillas, 28 paragolpes, 20 guardaplasts, 1 torpedo, 1 portón trasero, 1 guardabarros), motivo por el cual se decidió su  secuestro, con el aval de la UFI Nº 12 del Departamento Judicial de Quilmes, que ordenó la aprehensión del comerciante de 50 años.