En Parque Patricios, por la quinta jornada de la Copa de la Liga, el Globo ganó 2-0 ante el Lobo en un partido clave de la zona baja de la tabla.
Huracán derrotó 2-0 a Gimnasia en el Tomás Adolfo Ducó, con goles de Fabio Pereyra y Walter Mazzantti, en un duelo clave en la lucha por el descenso. Con la expulsión de Federico Fattori en el cierre de la primera parte, el Globo superó al Lobo y arde la zona del descenso.
En un encuentro clave por la permanencia en la Copa de la Liga, Huracán fue mejor en los primeros tramos del partido con más oportunidades de gol ante un Gimnasia que tuvo las más claras.
Una gran jugada para el Lobo de Matías Abaldo, habilitó con un centro atrás a Benjamín Domínguez que le entró mordido al balón de frente al arco de Lucas Chaves que evitó el primer tanto de la noche. Antes del cierre de la primera mitad, Federico Fattori le metió un planchazo terrible en la rodilla a Abaldo y dejó al Globo con 10.
Ya en el complemento, el equipo de Diego Martínez lo empezó ganando casi desde el vestuario. Desde un tiro de esquina, Echeverría conectó de cabeza, Chaves dejó el rebote y Fabio Pereyra la empujó para poner el 1-0 a favor del local.
El conjunto platense con un jugador de más no pudo frenar los ataques del Quemero, al que nada le afectó la expulsión de Fattori. Asimismo, Matías Cóccaro erró una chance increíble. El Zorro condujo un contraataque en soledad y cuando quedó mano a mano con Chaves la picó, pero el balón se fue apenas afuera.
El conjunto de Madelón fue mejor cuando el juego era 11 contra 11 y no aprovechó en ningún momento la superioridad numérica dentro del campo. De Blasis tuvo una clara desde un tiro libre, pero Chaves la tapó y la jugada terminó en gol anulado de Franco Soldano por infracción del delantero al arquero quemero.
Antes del final, Guillermo Benítez llegó hasta el fondo y tiró el centro para que Walter Mazzanti llegue solo al segundo palo y defina para el 2-0 definitivo.
Enorme triunfo de Huracán con alma y espíritu ante un Gimnasia sin juego y mucho menos reacción. El equipo de la Quemita respira aire fresco y se alejó un poco de la zona de descenso.