El consenso entre los oficiales se dificulta debido a que no tienen representantes definidos. En principio, muchos de ellos decidieron dar como gesto el retiro de los móviles policiales que se encontraban en los principales puntos de protesta y que vuelvan a servicio, en tanto que permanecerían en vigilia los efectivos que no se encuentran cumpliendo funciones. 

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Entre los principales puntos de disidencia a lo anunciado por Kicillof se encuentran el hecho de que no hubo compromiso claro sobre no aplicar sanciones ni represalias a quienes participaron de las protestas. Tampoco habría acuerdo con el monto de recomposición salarial, ya que pedían ser equiparados a los de la Ciudad de Buenos Aires, cuyos salarios actualmente rondan los 59 mil pesos de básico, y no con los de la Policía Federal, tal como enfatizó el mandatario provincial. 



(Noticia en desarrollo)