La normativa estipula que los repositorios digitales, es decir, los sistemas encargados de almacenar y organizar las recetas electrónicas, deben estar disponibles para todas las plataformas de prescripción y farmacias. Estas sólo podrán acceder a las recetas solicitadas específicamente por el paciente.

“La receta electrónica será la única modalidad vigente para la prescripción de medicamentos. No habrá prórroga ni nuevos plazos de adecuación”, anticiparon desde el ministerio de Salud. Además, destacaron que "la dispensa de los medicamentos se podrá realizar en cualquier farmacia del país, sin importar si está conveniada con la obra social o prepaga del afiliado".

MAYOR SEGURIDAD Y EFICIENCIA
La transición a las recetas electrónicas no sólo implica digitalizar las prescripciones, sino también implementar un sistema que valide y almacene estos documentos, asegurando su disponibilidad en las farmacias. Según la resolución, los sistemas informáticos que operen en este ámbito deberán estar integrados tanto con las plataformas de prescripción como con los puntos de venta en todo el territorio nacional.

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Entre los beneficios de esta medida, se destaca la reducción de errores médicos, una mayor trazabilidad de los medicamentos y una mejora en la toma de decisiones clínicas por parte de los profesionales de la salud. A diferencia de las recetas en papel, que son susceptibles a errores de interpretación debido a la escritura manual o posibles manipulaciones, las recetas electrónicas eliminan estos riesgos, incrementando la seguridad del paciente.

VENTAJAS DEL NUEVO SISTEMA
La implementación del sistema electrónico promete transformar el proceso de prescripción y dispensa en el país. Entre las principales ventajas, se encuentran la disponibilidad inmediata de las recetas en cualquier farmacia, independientemente de su ubicación o convenios, y la creación de mecanismos de respaldo que protejan la información de los pacientes frente a fallas técnicas.

Además, este avance agiliza los trámites, mejora la eficiencia en la gestión de medicamentos y contribuye a una mayor transparencia en el sistema de salud. Con la eliminación de las recetas en papel, se busca optimizar la seguridad y confiabilidad del proceso, facilitando tanto a pacientes como a profesionales el acceso a un servicio más moderno y efectivo.