Caso María Cash: el fin del pacto de silencio que llevó a la detención del camionero
La investigación reabrió viejas hipótesis y descartó pistas falsas hasta enfocar las sospechas en el camionero, cuya actitud y un pacto roto fueron decisivos para su arresto.
La desaparición de María Cash el 8 de julio de 2011 ha sido uno de los casos más desconcertantes en la historia reciente de Argentina. Durante más de diez años, la investigación estuvo llena de teorías inconsistentes y pistas falsas. Sin embargo,
un giro en los últimos meses llevó a la detención del camionero que fue la última persona en ver a María con vida. La revisión exhaustiva del caso, impulsada por el fiscal Eduardo Villalba, permitió descartar falsas pistas y centrar las sospechas en Romero.
Uno de los aspectos que
levantó sospechas fue la contradicción en su declaración sobre María. Afirmó no recordar su rostro ni la parte superior de su vestimenta, pero las últimas imágenes mostraban a la joven con el cabello recogido, lo que contradecía su relato. El punto de quiebre ocurrió cuando el camionero, al enterarse de la reapertura del caso, tuvo una conversación telefónica con su hermano. En la llamada, el hermano mostró desdén por María y sugirió que su hermano repitiera su declaración inicial, lo que complicó aún más la situación del sujeto.
El análisis técnico también cuestionó el relato del sujeto, quien había dicho que transportó a María desde la Rotonda de Trozalito hasta la gruta de la Difunta Correa.
Un estudio del trayecto demostró que dicha maniobra era prácticamente imposible debido al tipo de carga que llevaba el camión. Además, la actitud del sujeto y la declaración de su hermano fueron fundamentales para que la jueza Mariela Giménez ordenara su detención.
El hombre fue arrestado en una vivienda en Salta, donde
mostró una actitud resignada, creyendo que su aprehensión se debía a una notificación judicial. Su declaración será crucial para esclarecer su posible rol en la desaparición de María.
María Cash, una diseñadora de ropa de Buenos Aires, desapareció en Salta a los 29 años, después de tomar un colectivo en Retiro con destino a San Salvador de Jujuy. Fue vista por última vez en la terminal salteña, y las cámaras de seguridad la captaron en un peaje. Su caso, marcado por años de incertidumbre, comenzó a desentrañarse con la detención del camionero.