En el primer tiempo pasó poco y nada. Quilmes tuvo casi siempre la pelota, fue protagonista y dominador ante un All Boys que rara vez cruzó la mitad de la cancha. Sin embargo, prácticamente no llegó, salvo por algunos remates de afuera que se fueron cerca. Lo más saliente de la primera mitad fue cuando a los 26, otra vez tuvo que salir lesionado Marcos Enrique y lo reemplazó Santiago Puzzo. El empate parcial sin goles cuando se fueron al descanso estaba bien.

SEGUNDO TIEMPO
En el complemento todo seguía igual, Quilmes dominaba pero no llegaba, salvo con algún que otro remate de afuera. Pero a los 24, de tanto ir, llegó el esperado gol: habilitación de taco de Ramiro Luna para Axel Batista, que con otro toque dejó mano a mano a Lautaro Parisi, y el delantero definió sobre la salida del arquero. Quilmes abría un partido muy cerrado. 

En los minutos finales la visita se adelantó y El Cervecero, con espacios, pudo haber aumentado hasta el pitazo del juez.

Buen triunfo de Quilmes, trabajado pero merecido, que le sirve para seguir invicto, sumar 19 puntos y continuar en la cima de la Zona A. El próximo domingo visitará a Tristán Suárez.