El piloto de Williams se convirtió en el primer argentino desde Carlos Reutemann en 1982 en sumar puntos en la máxima categoría del automovilismo.
Largó octavo y se benefició por un tremendo choque entre Carlos Pérez y Carlos Sainz Jr. en la penúltima vuelta.
Franco Colapinto tuvo una magnífica actuación en el Gran Premio de Azerbaiyán, donde completó una histórica actuación y llegó octavo, lo que significaron sus primeros cuatro puntos en la Fórmula Uno.
El hecho histórico se produjo en su segunda competencia en la categoría y llegó 42 años y siete meses después del segundo puesto de Carlos Reutemann en el Gran Premio de Sudáfrica, el 23 de enero de 1982, en el circuito de Kyalami.
El destino quisio que fuera otro Williams, esta vez el del joven pilarense de 21 años, el que le devolviera protagonismo a la bandera celeste y blanca en la máxima expresión del automovilismo mundial.
La carrera la ganó el McLaren de Oscar Piastri, seguido por Charles Leclerc con Ferrari y George Russell con Mercedes, en un desarrollo que tuvo un giro dramático en las últimas dos vueltas cuando colisionaron Carlos Sainz y Checo Pérez en plena lucha por el tercer puesto.
Eso le permitió a Colapinto trepar dos posiciones, aunque un giro antes ya había logrado superar al Haas de Nico Hulkenberg para colocarse décimo y asegurarse al menos un punto en el campeonato de pilotos.
De este modo, el argentino llegó en la misma posición desde la que largó, ya que si bien había obtenido el noveno lugar en la grilla de partida, la penalización a Lewis Hamilton, con Mercedes, quien comenzó desde el pitline.
En la vuelta 11 realizó la parada para cambiar neumático medio por duro. Fue el primero en hacer la maniobra y al retornar ocupaba el puesto 15 pero las detenciones del resto le permitieron llegar al 11, hasta que en la recta principal en una buena maniobra sobrepasó al Alpine Pierre Gasly para quedar décimo.
En la vuelta 36 el pilarense cayó a los puestos que no obtienen puntaje al ser superado por Nico Hülkenberg de Haas y por su compañero Alex Albon. Quedó decimoprimero.
A partir de allí aguantó el asedio del siete veces campeón del Mundo, Lewis Hamilton y del debutante Oliver Bearman (Haas), y en muchas vueltas fue más veloz que ellos. Esa tendencia se afianzó con el avance de las vueltas y a dos giros del cierre sobrepasó a Hülkemberg para entrar en zona de puntos, hasta que el accidente de Pérez y Sainz lo benefició para quedar octavo.
Fue un gran domingo para Williams, que con el séptimo puesto de Alex Abon logró sumar 10 puntos en el campeonato de Constructores.
