Francisco Comesaña provocó el sismo de la jornada en Wimbledon, el tercer torneo de Grand Slam de la temporada: eliminó nada menos que al número seis del mundo.

El marplatense de 23 años, entrenado por Sebastián Gutiérrez -el coach de Sebastián Báez-, se impuso por 6-4, 5-7, 6-2 y 7-6 (5) frente al ruso Andrey Rublev y avanzó a la segunda ronda en el torneo más importante del circuito.

El argentino, ex 87° del mundo, entendió todos los secretos del tenis sobre césped y se mantuvo en el partido incluso luego del parate por lluvia, tras el que volvió para cerrar un tercer parcial clave.

Durante todo el desarrollo conectó nada menos que 21 aces, con un 70 por ciento de puntos jugados con el primer servicio -concretó el 74 por ciento de esos puntos-.

Formado en el Edison Lawn Tenis de Mar del Plata, Comesaña atraviesa el mejor momento de su carrera y ganó nada menos que su primer partido en un cuadro principal de Grand Slam.

Actual 122° del ranking ATP, el argentino se había perdido Roland Garros tras sufrir en la previa una lesión durante el Challenger de Mauthausen, en Austria. "Nos volveremos a ver", dijo entonces, aunque la revancha le llegó más pronto en Wimbledon.