
Con total autocrítica, el entrenador de Quilmes habló de la dura derrota ante Mitre. Ariel Fuscaldo aseguró que el equipo no tuvo orden y se desesperó. Sólo rescató la actitud de los jugadores.
Mucha bronca e impotencia se mostró en el entrenador interino de Quilmes a la hora de analizar la caída frente a Mitre de Santiago del Estero. Ariel Fuscaldo no dudó en reconocer que al equipo le faltó orden, algo de lo que se hizo responsable. Además habló de desesperación y de mala postura en los duelos. Sólo destacó la actitud.
Ariel Fuscaldo trató de explicar en rueda de prensa el porqué de la derrota ante Mitre. El DT cervecero dijo que “el primer análisis es que fue un mal partido por donde se lo mire, a excepción de lo actitudinal, obviamente. El análisis que hago, sobre todo en el primer tiempo, es que preveíamos algunas situaciones en las que uno puede o debe tratar de contrarrestarlas, pero lo que no preveíamos era tener desorden propio, que fue lo que ocurrió”.
-¿En qué aspectos los sorprendió el rival?-Creo que nos sorprendió el arranque, más población en la mitad de la cancha, un parado distinto a lo que venían haciendo o lo que manejábamos nosotros. Tratamos de reorganizarnos enseguida, tratando de tapar las bandas, nos volvieron a poblar la mitad de cancha, lo intentamos contrarrestar y nos costó hacer pie. Si bien hubo virtud del rival, tuvimos una mala postura respecto a los duelos. Y después hay un análisis que quedará para adentro en lo que respecta a la pelota parada, algo que ya se sabía. El golpe del primer gol nos desestabilizó un poco, pero el segundo, que era previsible, es el más doloroso. Y después hay que saber manejar la ansiedad, es lo que más nos costó. Se entró en un terreno de desesperación y de desorden cuando se fue a buscar.
-¿Qué fue lo que más le faltó al equipo?-En primer punto, orden, del cual soy responsable. Eso nos costó esa reorganización rápida que tenemos que tener, y si trazamos un paralelo, prácticamente adoptamos la postura que tuvo Chaco For Ever en el partido pasado para con nosotros, entrar en un terreno de desesperación y dejar espacios. Pero bueno, hay que seguir trabajando como siempre, porque los problemas más graves en cualquier plantel y en cualquier deporte son cuando no hay una base de actitud como para trabajar, y me parece que Quilmes, en ese aspecto está bien. Porque dentro de ese marco de desorden, mostró en todo momento la intención de buscar el arco rival, ese sería si se quiere el aspecto positivo en el segundo tiempo, aunque con un resultado muy adverso. El equipo tuvo un parado mucho más alto y una intención. Entonces, me parece que cuando la base de actitud existe, hay esperanzas de trabajo de todo momento. Habrá que trabajar mejor el tema de la organización.