El nuevo estadio, en Avenida La Plata al 1700, será techado en su mayor parte, tendrá 46.264 butacas y formará parte de un complejo urbano con espacios verdes, establecimientos educativos y culturales, servicios sociales, dependencias de seguridad, un centro comercial y un hotel.

En un acto realizado en Avenida La Plata al 1700, el presidente Marcelo Tinelli dio detalles del plan maestro de obras que se propone "rejuvenecer al barrio a través de la cultura y la integración que impulsará el club".


El nuevo estadio, techado en la mayor parte de la superficie, tendrá 46.264 butacas y formará parte de un complejo urbano con espacios verdes, establecimientos educativos y culturales, servicios sociales, dependencias de seguridad, un centro comercial y un hotel.

"Este centro integral con estadio en el medio le va a devolver a Boedo un montón de las cosas que había perdido. Hemos hecho un gran trabajo con todos los vecinos, los que estaban a favor y en contra, para saber sus necesidades. A través de todas esas conversaciones, pudimos incorporarle a nuestro proyecto original un montón de aspectos de utilidad para el barrio", contó Tinelli.

"Se trata de una de las transformaciones urbanas, culturales e históricas más importantes de la Ciudad de Buenos Aires. El impacto positivo está garantizado por todo el proceso de participación que se ha realizado con los vecinos", aseguró Fabio De Marco, uno de los arquitectos que intervinieron en el proyecto.

"Es un gran delirio -aceptó Tinelli-, algo que parece una locura pero de locuras nos hemos nutrido los hinchas de San Lorenzo a lo largo de la historia y esta será una más que vamos a encabezar".

San Lorenzo recuperó las tierras despojadas por los militares a través de la Ley de Restitución Histórica. Con el aporte de sus socios e hinchas le compró el predio a la empresa Carrefour, que desmontó el supermercado, y finalmente hizo posesión del lugar el 1 de julio de 2019.

Desde entonces, transita la última etapa del proceso legislativo a la espera de obtener los permisos para comenzar con las obras, algo que sobre lo que Tinelli mostró cautela por la dificultad económica.

"Es difícil poner un plazo, ahora viene toda una ingeniería financiera que estamos trabajando por diferentes lados. Hay empresas de China, Alemania, Suiza y Estados Unidos que nos han contactado. Tenemos fe en poder conseguir el crédito", completó Tnelli.