El problema, que acarrea olores nauseabundos por la materia fecal, había sido denunciado días atrás por los vecinos ante autoridades comunales. No es la primera vez que esto ocurre: según indicaron, varias veces al año la cloaca se tapa y deben llamar a AySA para que envíe una cuadrilla. 

Sin embargo, el material que la obstruye es siempre el mismo orgánico, el cual sería arrojado ilegalmente por un comercio de la zona. Cabe señalar que está prohibido que las industrias y comercios arrojen sus desechos a la red cloacal y, oportunamente, uno de los locales había sido infraccionado por inspectores municipales justamente por este motivo, meses atrás.