Los accesos, con molinetes y lector de tarjeta SUBE, habían sido instalados en el marco de la renovación de la estación, que precisó elevar los andenes para adecuarlos a la altura de los nuevos trenes eléctricos. Sin embargo, la inversión realizada para dar mayor accesibilidad a los pasajeros parece desperdiciada desde que, sin explicación alguna, los encargados decidieron clausurarlas.

De este modo, los usuario que utilizan el servicio de tren deben ingresar únicamente por las entradas principales, que dan a 9 de Julio –del lado hacia Plaza Constitución- y a Roque Sáenz Peña –del que se dirige a La Plata-. 

“Ya estoy cansada de esto. Al principio era mucho más cómodo y me gustaba como había quedado la estación, pero ahora tengo que dar toda la vuelta para entrar, ya que vengo desde el lado de Zapiola. Esto hace que a veces pierda el tren, cuando con los molinetes laterales podía llegar bien, expresó una de las pasajeras frecuentes. 

Y consideró: “Al final era mejor la provisoria: menos engorrosa, más directa y con 4 entradas. Sería bueno que las reabrieran porque, de hecho, por algo las hicieron y están”.