El plantel cervecero se entrenó este jueves por la mañana, desde las 9.30 y a puertas cerradas en el campo auxiliar del Estadio Centenario, donde se hicieron trabajos tácticos. Todo se inició con una entrada de calor física en un circuito de fuerza preventiva con saltos en cajones, pesas y movimientos en colchonetas. Posteriormente se hicieron toques de pelota grupos y se repartieron las pecheras para dar inicio al primer trabajo táctico de la semana.

El DT Facundo Sava paró dos equipos, el titular y el suplente, que atacaban por turnos hacia un solo arco en el que se turnaban los arqueros. Finalmente se enfrentaron entre sí, para luego terminar con ejercicios de elongación sobre colchonetas. El entrenador hizo dos cambios obligados debido a la lesión de Adrián Calello y a la suspensión de Agustín García Basso (fue expulsado ante Deportivo Riestra). En sus lugares ingresaron Jonás Acevedo y Julián Bonetto.

De manera diferenciada, con trabajos físicos intensos, se entrenaron Adrián Calello y Facundo Pons, ambos con esguinces en el tobillo derecho. Calello hoy está más afuera que adentro, mientras que Pons trabajó de manera más intensa y podría llegar con lo justo. 

Quilmes volverá a entrenarse este viernes por la mañana, desde las 9.30 y a puertas cerradas en Estadio Centenario, donde se haría la práctica formal de fútbol de la semana. El sábado se ensayarían las jugadas preparadas de pelota detenida, también en el estadio y en turno matutino, y posteriormente se dará a conocer la lista de los jugadores citados para el partido.

Los que lo deseen se podrán concentrar en la Villa Centenario ese mismo sábado por la noche, mientras que los que decidan lo contrario se reencontrarán con el grupo el mismo domingo al mediodía para almorzar y esperar por el encuentro de la tarde.