“Desde que empezó la pandemia en Argentina coordinamos acciones con el gobierno municipal”, aseguró Villar en diálogo con el programa “Ir a más” por Radio FAN (103.9 fm). “Primero pusimos a disposición el gimnasio del campo de deportes, a pedido de la secretaría de Seguridad, para asentar un operativo de la Policía Bonearense. También cedimos aulas y el comedor, que están aislados del resto de la Universidad, para que puedan generar los alimentos para los enfermos que estén aislados en los pabellones”, detalló.

Como parte de su compromiso social, la UNQ asistió además con alimentos a la población vulnerable del distrito: “Donamos el último stock que nos quedaba de SuperSupa al Municipio y esperamos volver a producir pronto. Asimismo, en la cocina de nuestra Escuela Secundaria de Ezpeleta estamos cocinando con insumos provistos por la Municipalidad para los vecinos del barrio, entregando unas 600 raciones por día. Y articulamos mucho con los productores de alimentos de la economía social y solidaria, con quienes tenemos muy buen vínculo”, enumeró el Rector.  

“Entendemos que la Universidad es un actor más en el entramado del territorio y tenemos un mandato específico, que tiene que ver con la educación, la ciencia y la tecnología. Pero que además debemos estar en articulación permanente con la sociedad. Somos una universidad de puertas abiertas y de mucha relación y vinculo con las otras organizaciones sociales, económicas, políticas y culturales que se desempeñan en el distrito”, aseveró. 

ACTIVIDAD ACADÉMICA
Finalmente, Villar indicó que hasta el momento “no hay fecha para la vuelta a clases presenciales”, aunque estimó que puedan darse las condiciones después de junio. “El nivel de incertidumbre por el que atravesamos debido al coronavirus hace que debamos tomar decisiones en un escenario de permanente cambio”, señaló. Además debieron suspender todos los exámenes presenciales previstos.

Cabe recordar que el lunes comenzaron las cursadas bajo la modalidad virtual para todos los alumnos de la presencial, que representan un 60 por ciento de la matrícula, frente al 40 por ciento perteneciente a la UVQ, quienes comenzaron su actividad académica con normalidad. 

“Hicimos un esfuerzo de gestión para que todos los estudiantes tengan su aula virtual y capacitamos a los docentes para manejarlas. Nos parecía importante sostener la actividad educativa porque es parte de nuestra identidad y no queríamos poner en riesgo el cuatrimestre. Esperamos trabajar así hasta que se pueda volver a las aulas”, manifestó.