Uno solo de los 11 rugbiers detenidos por la muerte de un joven de 19 a la salida de un boliche en Villa Gesell, prestó declaración durante 45 minutos ante la Justicia y negó haber tenido participación en los hechos. Los otros 10 acusados, que tienen el mismo abogado, optaron por ampararse en su derecho de no declarar.
Pablo Ventura, el joven detenido en Zárate por el crimen de Fernando Báez Sosa, negó ante la fiscal Verónica Zamboni haber estado en la ciudad de Villa Gesell y dijo que no tiene nada que ver con el homicidio. Antes de la declaración de Ventura, el padre del joven insistió que su hijo es inocente y aseguró que se trata de un "pase de factura, un ajuste de cuentas".
Cabe señalar que de 11 los detenidos, dos están más complicados porque hallaron sangre en sus zapatillas, por lo que son considerados presuntos "coautores de homicidio agravado". El resto serían partícipes necesarios del crimen.
Los 10 jóvenes defendidos por el mismo abogado, serían trasladados al penal de Dolores, mientras se resuelve sus situaciones procesales. Por ahora, hay 5 alojados en Pinamar y otros 5 en General Madariaga.