1.  CEPILLA TU LENGUA 
Todos somos conscientes de los beneficios de lavarse los dientes todos los días para ayudar a prevenir la caries, pero muchas veces pasamos por alto cepillar la lengua. La parte posterior de la lengua es un caldo de cultivo para los gérmenes y con un solo un minuto basta para eliminar la placa causada por los alimentos. También te dejará un aliento mucho más fresco. 

2. ESTIRATE CUANDO TE LEVANTES DE LA CAMA
Para muchos de nosotros  es una reacción natural e involuntaria que hacemos todas las mañanas pero debe convertirse en parte de nuestra rutina. Después de 8 horas de sueño nuestro cuerpo necesita unos 20 segundos de estiramientos. Estira los brazos por encima de tu cabeza y levanta los dedos de los pies manteniendo tu cuerpo lo más recto posible. Sentirás los beneficios casi de inmediato. 

3. UTILIZA PROTECTOR SOLAR DE MANERA DIARIA
Cuando hace calor y el sol aprieta somos más conscientes de la necesidad de proteger nuestra piel de los rayos nocivos. Sin embargo, sólo porque está nublado no quiere decir que el sol no está teniendo un efecto en tu piel. Los estudios han demostrado que las personas que usan protector solar o una crema hidratante de manera habitual mantienen la piel con aspecto más joven que los que no lo hacen.

4. DEJA LOS ZAPATOS EN LA PUERTA
Muchas personas consideran que es de buena educación quitarse los zapatos y dejarlos en el pasillo al entrar en una casa ajena, pero sucede lo mismo cuando entramos en nuestra casa. Trata de habituarte a dejar los zapatos en la entrada de tu casa. Es de pura lógica: los zapatos contienen bacterias y suciedad que se podrían expandir por toda la casa.  

5. TOMA UN DESCANSO FRENTE A LA COMPUTADORA
Nada ejerce más presión sobre tu visión que mirar fijamente una pantalla de computador durante gran parte del día. Si trabajás con una computadora durante ocho horas, deberías tomar descansos de 20 segundos cada 20 minutos. Tu visión es demasiado importante y la tenemos que cuidar. Además esta técnica te ayudará a mantener los niveles de concentración.

6. LIMPIA TU ESTROPAJO EN EL MICROONDAS
El lugar de la casa donde se concentran más gérmenes es el estropajo de la cocina más incluso que la taza del inodoro o la puerta principal. Es aconsejable cambiarlo regularmente, pero además un buen truco es ponerlo en el microondas cada día para matar los gérmenes y bacterias no deseados. 

7. CONTROLA TUS ESTORNUDOS
Cuando estamos enfermos estornudamos de manera habitual, pero puede suceder también que estornudemos diariamente sin estar resfriados. Hay que ser precavidos y no utilizar nunca las manos, pues esparciremos los gérmenes por toda la casa. Es mejor limpiarnos con un toallita húmeda y tirarla inmediatamente a la basura. 

8. CENTRATE EN TU RESPIRACIÓN
La ansiedad no sólo causa una gran angustia sino que también tiene un efecto negativo en su salud en general. Sin embargo, controlar la respiración es una manera rápida y fácil para aliviar y manejar el estrés. La próxima vez que te sientas ansioso tomate un minuto para respirar lenta y profundamente. Ayudarás a disipar las emociones negativas, refrescar la mente y reducir la presión arterial. 

9. TOMÁ TU LECHE
Si consumís cereales deberás saber que el 40% de los nutrientes contenidos se disuelven cuando se agrega la leche. Esto significa que tenemos que beber la leche sobrante con el fin de beneficiarse del impulso nutricional que los cereales proporcionan. 

10. DECÍ EL ALFABETO AL LAVARTE LAS MANOS
Aquello que nos enseñaron en nuestra infancia sobre lavarse las manos antes de sentarse a comer o antes de salir del baño es realmente importante. La mayor parte de nosotros tan solo se limpia las manos durante unos breves segundos. Recitar el alfabeto mientras nos lavamos las manos es una buena manera de permanecer más tiempo con nuestras manos bajo el agua.