El Cervecero se entrenó ayer por la mañana en el campo auxiliar, donde se hicieron partidos de fútbol reducido. Brandon Obregón, recuperado de su lesión, trabajó con normalidad. Quien no lo hizo fue Federico Anselmo.

Quilmes todavía no tiene equipo con vistas al partido del próximo sábado ante Olimpo de Bahía Blanca. El encuentro se jugará en el Estadio Centenario desde las 13.05, con el arbitraje de Ariel Penel y la televisión en directo de DirecTV Sports. Ayer se hicieron tareas técnicas en el anexo y hoy habrá fútbol formal.
El plantel cervecero se entrenó ayer por la mañana, desde las 9 y a puertas cerradas en el campo auxiliar del Estadio Centenario, donde se hicieron tareas físicas y técnicas. La actividad comenzó con un trabajo físico en la cancha dos del anexo, en un circuito de coordinación y velocidad, con saltos a vallas y slalom entre conos y estacas. Posteriormente y ya en la cancha uno, se realizaron primero toques y traslado de pelota en grupos, para dar paso a un trabajo técnico, con partidos de fútbol en espacios reducidos. El plantel se dividió en cuatro equipos de siete jugadores cada uno, que se enfrentaban en dos canchas a la vez, más un comodín (que jugaba para el equipo que tenía la pelota). Ambos conjuntos rotaban hasta enfrentarse todos contra todos en ambas canchas. La novedad principal fue que pudo participar de este trabajo sin problemas (fue el comodín) Brandon Obregón, que está prácticamente recuperado del desgarro grado uno que padece en el gemelo interno derecho, por lo que podría estar el próximo sábado ante Olimpo. Por otra parte, quien no participó de esta actividad fue Federico Anselmo, que viene arrastrando una molestia en la rodilla izquierda. El goleador cervecero hizo ayer sólo ejercicios de kinesiología en el gimnasio del estadio, aunque se cree que llegará bien al encuentro del próximo sábado. 

HOY SE HARA LA PRACTICA DE FUTBOL
En el trabajo de fútbol reducido, el equipo de pechera roja alineó a Esteban Glellel; Alan Alegre, Juan Imbert, Mauro Bellone, Franco Niell, Facundo Bruera y Raúl Lozano. El conjunto de pechera naranja tuvo a Alan Ferreyra; Camilo Machado, Matías Barrientos, Martín Ortega, Juan Larrea, Juan Altamiranda y Eric Ramírez. El de pechera verde contó con Marcos Ledesma; Gastón Pinedo, Augusto Max, David Ledesma, Elías Barraza, Cristian Zabala y Tomás Verón Lupi. Finalmente, el equipo de remera blanca formó con Emanuel Bilbao; Justo Giani, Rodrigo Mieres, Tomás Blanco, David Drocco, Matías Noble y José Luis Valdez. 
De manera diferenciada, además de Federico Anselmo, se entrenaron con tareas físicas en el anexo, Tomás López (operado de los ligamentos cruzados de la rodilla derecha) y Marcelo Cardozo (contractura en el aductor izquierdo, está en duda para el sábado).
Quilmes volverá a entrenarse hoy por la mañana, desde las 9 y a puertas cerradas en el Estadio Centenario, donde se hará la práctica formal de fútbol de la semana, en la que el entrenador Leonardo Lemos probará el equipo titular que tiene en mente para el partido (sin Raúl Lozano, que debe cumplir con una fecha de suspensión por haber sido expulsado en Puerto Madryn). Además, en el transcurso de la tarde se dará a conocer la lista de los jugadores citados para el encuentro y por la noche, los convocados se reencontrarán en el estadio para cenar y concentrarse en la Villa Centenario. Mañana, de nuevo a portón cerrado en el estadio y por la mañana, se ensayarán las jugadas preparadas de pelota detenida y se definirá el equipo. Posteriormente, los citados almorzarán y volverán a quedar concentrados en la Villa a la espera del encuentro del sábado ante Olimpo.

El pueblo cervecero prepara una fiesta para apoyar al equipo
El próximo sábado, el Quilmes Atlético Club se juega el partido más importante de los últimos cuarenta años. Porque después de aquél encuentro con victoria 3 a 2 en Rosario ante Central en 1978 que sirvió para alcanzar la gloria, ante Olimpo puede servir para evitar el abismo. Quilmes se juega la permanencia en la B Nacional, un premio que parece pobre, pero del otro lado está la B Metropolitana, categoría a la que el Decano del Fútbol Argentino nunca descendió (sólo la jugó por una restructuración de los torneos). Por ello, todos tienen que estar y todos van a estar. Los optimistas, los pesimistas, los sponsors, los hinchas, los simpatizantes, los socios, los vecinos de la ciudad. Se prepara una fiesta para darles a los jugadores el apoyo necesario como para superar esta prueba de fuego, que paradójicamente, servirá para evitar el infierno. El sábado, todos al Estadio Centenario.