Los Gauchos de Boedo y el Pincha empataron 1-1 por la fecha 21 de la Liga Profesional 2024, en una tarde noche en el Nuevo Gasómetro donde el juego brusco eclipsó los goles de Iván Leguizamón y Joaquín Tobio Burgos.
Pese a la entretenida primera etapa, la brusquedad que trajo consigo el complemento terminó por marcar lo que sería igualdad entre Gauchos de Boedo y Pincharratas. Fue justamente la visita quien contó con un mejor inicio al encuentro, aunque fueron las grandes intervenciones de Gastón "Chila" Gómez para sostener el cero en su valla.
El primer embate de Boedo significó la apertura del marcador, con un gran desborde de Ezequiel Cerutti sobre la banda derecha para lanzar un centro que Iván Leguizamón cambió por gol al derrotar la marca de Luciano Lollo.
Una demostración del excelso momento que atraviesa el Pocho, con el gol de su compañero alcanza las cuatro participaciones consecutivas en tantos del Ciclón (convirtió ante Central Córdoba y asistió también frente a Banfield como en el juego con Barracas Central).
Poco duró la alegría azulgrana ya que el Pincha no tardó en encontrarse con su merecido primer grito del encuentro. Gabriel Neves lanzó un pase entre líneas con el que Alexis Manyoma aprovechó para vencer la marca de Elías Báez y sirvió en bandeja el empate a Tobio Burgos, que solo tuvo que empujar la pelota para nivelar el marcador tan solo ocho minutos después del 1-0.
Lamentablemente para el espectáculo, las acciones en la segunda etapa estuvieron muy lejos de los fuegos artificiales que los protagonistas regalaron en la primera mitad y los cambiaron por chispas, al transformar el juego en una batalla a cielo a abierto que tomó gran temperatura y alcanzó su punto de ebullición con la brutal patada de Elian Irala.
El mediocampista, que solo llevaba 13 minutos en cancha, en su afán de disputar una pelota que ya se encontraba en las manos de Matías Mansilla le impactó en la cabeza con los tapones; un golpe tal que dejó ensangrentado al arquero rival y que terminó en expulsión directa tras la revisión del VAR. Una jugada que trajo polémica por el agarrón previo de Luciano Lollo a Jhohan Romaña por el que todos en el dueño de casa pidieron penal.
Pese a la inferioridad numérico, el equipo de Russo intentó que los tres puntos permanezcan en el Pedro Bidegain con más amor propio que con ideas de juego, lo que finalmente no alcanzó y terminó por sellar las tablas. Un resultado que volvió a despertar el enfado de la hinchada local, que apuntó contra los jugadores por la mala campaña.
