El Cervecero retornó este martes por la tarde a los entrenamientos, luego del triunfo en Jujuy del pasado domingo. Los titulares hicieron tareas físicas livianas y el resto, trabajos técnicos. Algunos jugadores trabajaron diferenciado.
Quilmes comenzó este martes la semana de trabajo de cara al partido del próximo domingo como local ante Deportivo Maipú de Mendoza, que se jugará desde las 15 con arbitraje de Ariel Penel y televisión de TyC Sports Play, por la 36ta fecha de la Zona A de la Primera Nacional. Los jugadores trabajaron en el anexo con el mejor ánimo, aunque con algunos ausentes por distintas molestias.
El plantel cervecero retornó este martes a los entrenamientos, luego de haber tenido libre el pasado lunes, tras el gran triunfo como visitante del último domingo ante Gimnasia y Esgrima de Jujuy. Con el mejor de los ánimos, los jugadores comenzaron así la semana de trabajo de cara al partido del próximo domingo como local frente a Deportivo Maipú de Mendoza, con cuatro prácticas por delante.
Quilmes se entrenó desde las 17 y a puertas abiertas en el campo auxiliar, donde como sucede en cada comienzo de semana, el plantel trabajó dividido en dos grupos. Por un lado lo hicieron siete de los once que fueron titulares en Jujuy (Federico Tévez, Santiago Moya, Leandro Allende, Iván Ramírez, Ramiro Luna, Emanuel Herrera y Lautaro Parisi), que hicieron trabajos físicos livianos.
Por el otro, los que no jugaron en Jujuy o lo hicieron pocos minutos, participaron de un ejercicio de tenencia de pelota. De todos modos, lo más importante del día pasó por el parte médico, y las noticias fueron menos graves de lo que se esperaba. Herrera y Luna sólo tienen sobrecargas musculares y trabajaron normalmente con el grupo de los titulares. Ayrton Sánchez, con un traumatismo en la cabeza, no estuvo porque fue a hacerse una tomografía (se espera que pueda llegar bien).
Los dos que trabajaron diferenciado (además de Fabián Bordagaray, que arrastra un esguince en el tobillo derecho) fueron Enzo Kalinski y Damián Adín. Kalinski tiene un edema porque se abrió la cicatriz del desgarro que tuvo hace algunas semanas. Llegaría con lo justo pero no lo arriesgarían. Adín, por su parte, tiene una distensión muscular y, si bien no está descartado, tampoco sería arriesgado.
Quilmes volverá a entrenarse este miércoles por la mañana, desde las 10 y a puertas abiertas en el campo auxiliar, cuando se harían tareas técnicas para los titulares y fútbol para los suplentes.
