La joven se había profugado a Mar del Plata, donde fue geolocalizada por su celular, y tras discutir varios días con su mamá y un hermano, accedió a entregarse voluntariamente a la Justicia. Quedó acusada de “homicidio”, al igual que su hermano menor de edad.

El crimen del joven de 22 años tuvo lugar el 14 de junio último en una plaza de la calle General Heredia al 2800, Avellaneda, en el marco de una disputa por el supuesto robo de un celular. El adolescente reclamaba la devolución del aparato al joven de 22 años, lo que derivó en una pelea a golpes de puño.

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Durante la pelea, el joven de 22 años quedó inconsciente en el suelo, donde le habrían pateado la cabeza. Vecinos que presenciaron la escena llamaron de inmediato a la Policía y a una ambulancia. Fue llevado de urgencia al Hospital Interzonal General de Agudos Doctor Pedro Fiorito, donde los médicos confirmaron su fallecimiento debido a las heridas en la cabeza.

Cuando la joven accedió a presentarse ante la Justicia para responsabilizarse de sus actos, personal de la DDI Avellaneda/Lanús y familiares fueron hasta Mar del Plata, en la zona cercana al casino, donde se entregó. Fue trasladada hasta la sede policial avellanedense, y puesta a disposición de la UFI N° 5 de Lomas de Zamora.