La Bombonería Firenze celebra este 30 de agosto su 36 aniversario, ocasión propicia para que su titular, Stella Maris López, recordara junto a PERSPECTIVA SUR los inicios y el momento en que se decidió a poner en marcha una dulcería en pleno centro de Quilmes.

“Fue en un viaje que hicimos con mi esposo a su Italia natal, cuando fuimos con nuestros hijos a visitar a familiares en la Toscana. Paseando por Firenze nos encontramos con un negocio bellísimo de dulces y chocolates, y allí nació la idea de hacer algo en nuestro Quilmes. Y como soy decoradora y siempre me gustó armar vidrieras y la regalería, cuando llegamos empezamos a madurar la idea del negocio. Proyectamos así un local para la venta de chocolates, pero le agregamos un buen café molido en el acto, porque combinaba muy bien”.

 “Un 30 de agosto de 1986 inauguramos Firenze en San Martín 656, y así comenzamos. Mis hijos eran muy chiquitos, pero con el correr del tiempo, ellos se involucraron en el negocio. Ahora son grandes, profesionales, cada uno está en lo suyo, pero sus primeros pasos los hicieron en la Bombonería familiar”.



Los gustos de la gente en estos 36 años “no han cambiado mucho, pero ahora hay mucha demanda de chocolate amargo en diferentes porcentajes de cacao. En cuanto a regalar bombones, nunca pasa de moda, porque es una tradición. Tal es así que nuestros clientes son de muchísimos años, y la tradición continúa a través de las diferentes generaciones, de manera que vienen los abuelos, vienen los padres, y vienen los nietos”, expresó Stella Maris.

EL SECRETO DE FIRENZE
“El estilo de Firenze gusta mucho a la gente porque combina exquisiteces con buena regalería. Se destaca porque con mi profesión decoramos los regalos de una manera única. Tenemos artesanos que elaboran los envases, todos diferentes; hacemos cintas y moños en el local, y tengo colaboradoras en el mostrador expertas, lo que hace que cualquier regalo que te lleves de Firenze te hace quedar súper bien”.

“Los chocolates son artesanales, y por otra parte somos representantes exclusivos de varias firmas del interior del país, como Córdoba, Santa Fe, en alfajores, dulces, licores, cosas que no se van a encontrar en otro lado más que en Firenze. También funciona muy bien la venta de café ‘Fundador’ molido en el acto, porque es un café Premium, firma a la que representamos desde que abrí el local”.
“Los artículos son de primerísima calidad, y tenemos mucho cuidado en lo que le ofrecemos al cliente, porque es fiel, siempre vuelve; pasan los años y la gente vuelve, porque en Firenze hay honestidad, calidad y precio”, resumió Stella Maris.

“No quiero dejar de mencionar el gran acompañamiento de mi hermosa familia en todos estos años, porque esto no lo hice yo sola. Pese a que mi esposo tiene otra profesión, siempre me acompañó, lo mismos que mis hijos. Todos juntos celebramos los 36 años de Firenze”, finalizó Stella Maris.