Mientras tanto, la Vicaría de Solidaridad de la Diócesis de Quilmes emitió un comunicado expresando “nuestro más cercano sentimiento de empatía y deseos de justicia para con las víctimas de abuso de menores que fueron captadas y utilizadas para este aberrante delito”.

“Sabemos que estos hechos no son aislados ya que, desde hace varios años, desde el Departamento de Trata y Delitos Conexos del Obispado de Quilmes venimos asistiendo a numerosas víctimas atrapadas por las redes de trata, reduciéndolas a objetos sexuales o con otros fines, y sentimos impotencia e indignación cuando se trata de ocultar tales delitos”.

“Asimismo, pedimos a quien corresponda que asista a las víctimas en su integridad física y psicológica que con coraje y valentía han decidido contar lo que les hicieron vivir develando este delito tan oscuro. Reiterando nuestra cercanía y empatía para con las denunciantes, confiados en nuestro Dios que sale siempre en defensa del débil y explotado, esperamos fervientemente que se haga justicia”, agrega la iglesia católica de Quilmes, Varela y Berazategui.